En esta boda nos desplazamos a varias localidades de la zona norte de Madrid. Empezamos con los preparativos de la novia en Majadahonda, donde nos esperaba con su familia y amigas. Eli llevaba un hermoso vestido de Aire Barcelona, con encaje y transparencias que complemento con una peineta que sujetaba un largo velo, mientras que Dani vestía de chaqué, una elección elegante y clásica que nunca falla.
Más tarde nos reunimos de nuevo los dos fotógrafos en la Iglesia de la Parroquia Santa María de Caná en Pozuelo de Alarcón. Construida en 1995 la arquitectura de esta parroquia responde a la tendencia del constructivismo. Destaca en su construcción la torre de 40 metros situada en el acceso principal y compuesta de una serie de arcos de medio punto; es uno de los edificios emblemáticos de esta localidad madrileña. Allí tuvo lugar la ceremonia religiosa.
Y llegamos al lugar del del banquete, el restaurante San Francisco en monte de El Pardo, donde realizamos la sesión de recién casados. Después los novios e invitados disfrutaron de un coctel al aire libre donde la pareja había preparado con mucho mimo algunos detalles hechos por ellos mismos. No se olvidaron de los regalos a los asistentes entre ellos un detalle solidario como las botellas de agua de Auara, que trabajan para llevar el agua potable allí donde mas lo necesitan. Ya en el interior del restaurante cena y baile para seguir con la fiesta.
Si te han gustado estas fotografías puedes ver la preboda de Eli y Dani, pulsando aquí. Una sesión igual de fotogénica y es que son una pareja que derrocha simpatía y naturalidad a raudales y eso se nota en las fotografías.
